¿Cómo mejorar la eficiencia en quirófanos?
Impacto de la prevención y protección en los hospitales:
El servicio de quirófanos es probablemente el de mayores costos en una institución de salud. Por lo tanto, cada minuto de tiempo muerto es una gran pérdida.
La eficiencia de quirófanos es probablemente uno de los mayores retos de una institución de salud. Del número de cirugías que pueda realizar dependerán los resultados financieros y la salud de la comunidad a la que está destinada a atender.
Los quirófanos implican un alto costo para un hospital. Exigen inversión en infraestructura, gasto en mantenimiento y contratar recurso humano especializado. Sus resultados afectan la rentabilidad de toda la institución, bien porque suelen subsidiar a otras áreas de los hospitales o porque soportan buena parte de los ingresos totales.
Por lo tanto, se espera una alta eficiencia, es decir, una mínima pérdida. En quirófanos cada minuto cuenta.
Causales de ineficiencia
Lograr buenos resultados no siempre es fácil. Son muchos los factores que intervienen en el buen uso del tiempo de quirófanos.
Los jefes de quirófano deben planear y coordinar todos los factores que se requieren para que la cirugía se lleve a cabo, en el momento previsto, idealmente durante el tiempo estimado, y con un mínimo de riesgo para el paciente y los profesionales. Muchos de esos factores son externos a la institución y algunos pertenecen a otras áreas:
- Aprobación de la cirugía por el sistema de salud y/o aseguradora
- Estado de salud del paciente (gripe, virus, presión alta, etc.)
- Disponibilidad de camas de hospitalización
- Disponibilidad de UCI/UCE
- Inventario de dispositivos, medicamentos o insumos
- Disponibilidad de ropa quirúrgica
- Equipos esterilizados
Las esperas para poder realizar la cirugía y las cancelaciones de procedimientos por razones médicas parecen inevitables y deberían considerarse un acierto de calidad. Se trata de la seguridad del paciente. Sin embargo, las otras causas deberían poder ser evaluadas y medidas para emprender acciones correctivas que permitan un uso óptimo del quirófano.
Indicador de ocupación
En la industria de la salud se estima que un quirófano es eficiente cuando se usa el 80% del tiempo disponible. Es decir, si la jornada es de 10 horas, dos horas se deben destinar a actividades no asistenciales o a tiempos muertos:
Entonces, ¿cómo optimizar el uso de los quirófanos?
Maximizar el tiempo requiere de datos. Se debe poder conocer:
La fórmula para conocer el índice bruto de ocupación es:
Supongamos que se hizo la evaluación de un día en un hospital. Los resultados no agradaron al director de quirófanos:
Un indicador de 68% de uso muestra claramente una oportunidad de crecimiento. En ese caso, seguro extremo pero posible, se utilizó mucho tiempo para el recambio y no se hicieron suficientes cirugías. El análisis exige respuestas a estas preguntas:
¿Por qué se programaron tan pocas cirugías?
¿Por qué se cancelaron las cirugías?
¿Por qué se dedica tanto tiempo al recambio?
¿Cuántas veces se repiten estos factores al mes?
Las soluciones pueden ser tan diversas como las causas:
Supongamos ahora que realizamos el análisis para una institución que considera tener unos buenos indicadores de uso bruto en sus quirófanos. El resultado podría ser:
El jefe de quirófano ha logrado uso óptimo del 80% y debería estar satisfecho. Sin embargo, se hace un par de preguntas:
¿Qué estamos haciendo bien y podemos mejorar?
¿Qué sobrecostos podemos modificar para obtener más rentabilidad?
El jefe sabe que la rentabilidad depende de los minutos y los costos.
¿Podrá mejorar?
Solución integral para mejorar la eficiencia
Para lograr una maximización del tiempo, será necesario revisar los procesos. Es probable que sea posible cambiar algunos procedimientos y protocolos para ahorrar tiempo.
Siguiendo con el ejemplo anterior, supongamos que el jefe encontró la forma de reducir el tiempo de recambio. El resultado fue un aumento en el tiempo útil en el quirófano de 40 minutos por día.
Además, redujo el tiempo que se dedicaba a vestir el quirófano para cada intervención. ¿Cuántos minutos? Entre cinco y ocho minutos.
Esos dos cambios le dieron la posibilidad de realizar una cirugía más cada día. Él calcula que serán 250 cirugías más al año.
Además, después de la revisión de los inventarios el jefe apoyó una decisión de reducir el stock en ciertos dispositivos.
¿Qué hizo el jefe de quirófanos para lograr esos resultados?
Combinar rentabilidad con más calidad
Al analizar el flujo de pacientes y los tiempos muertos, el jefe definió que el servicio debía operar con mayor eficiencia y calidad. El uso efectivo del tiempo de quirófano debía incluir los minutos necesarios para un buen protocolo de limpieza que garantizara la seguridad del paciente. Las tareas de limpieza son indispensables en la prevención y control de infecciones en sitio quirúrgico y, en consecuencia, impactan favorablemente la capacidad de atención de la institución.
Así mismo, definió que la calidad estaba asociada a la disminución de riesgos y a una mejor atención al paciente. Recomendó un margen de flexibilidad en las demoras por causas médicas, ya fueran por mayor tiempo en el quirófano o por tardanza en el ingreso.
En ese orden de ideas, el aumento en el uso de los quirófanos para una mayor rentabilidad suponía también un aumento en la seguridad para el paciente y el personal de la salud.
El jefe de quirófanos autorizó una prueba de paquetes quirúrgicos en tela descartable. Sabía que la tela de uso único ofrece una mejor barrera a fluidos corporales y por lo tanto es más segura en una cirugía. Además, encontró que:
Aún en un hospital en el que se hace un uso óptimo del quirófano, es posible mejorar la eficiencia, maximizar la rentabilidad y aumentar el flujo de pacientes. En efecto, algunos estudios realizados en hospitales han demostrado que con los paquetes quirúrgicos de uso único es posible lograr simultáneamente:
Por Katy Schuth B. – Redactora